Agujero negro

Agujero negro

mar en calma o espejo de la luna

velas como pellejos que sin viento adelgazan

un mundo esférico sin horizontes

un hemisferio de agua otro de viento

que en la noche es penumbra

Iluminada de estrellas quirales1

un espacio que gira en torno

como si él fuera el centro

un agujero negro que ve todo

y no puede advertir a nadie

1“I call any geometrical figure, or group of points, chiral, and say it has chirality, if its image in a plane mirror, ideally realized, cannot be brought to coincide with itself”, Lord Kelvin (1904).

Intentar

Intentar

llevamos conversando mucho tiempo

tú y yo aquí solos

deberíamos ir a algún lugar con gente

relacionarnos

ya sé que piensas que eso es peligroso

pero de tarde en tarde necesito caricias

las tuyas son demasiado virtuales

dirás que detrás de eso hay un anillo

una cadena

pero si no qué hacemos aquí solos

conversando de nuestras cosas tan limitadas

y no quiero escuchar que nuestra vida

no es más que un sinsentido

fuegos artificiales que acaban en silencio

ya me cansa tu voz y mi respuesta

necesito intentar

intentar

intentar

Sin estrategia

Sin estrategia

a fuerza de bloquear los pensamientos

que me alteran

el miedo

la tristeza

la alegría que el tiempo convierte en melancólica

mi pizarra parece una pared

que acaban de enlucir

una pared color nirvana

y la paz no se firma

cubriendo los grafitis que el recuerdo dejó

el color blanco no es signo de paz

sino de rendición

es el revestimiento del vacío

nada es posible en él pues no hay razones

para que algo suceda

entonces intenté otros caminos

me pasé al bando de los grafiteros

que firman las paredes con gruesos garabatos

efímeros dibujos

que el tiempo palidece

con más acierto que mi voluntad

y vuelvo al desconcierto

parezco un general sin estrategia

durante una batalla

en la que ya se sabe derrotado

Meditación sin velas

Meditación sin velas

mi horizonte se achica a cubos

igual que agua de un barco que zozobra

y mi occipital

vuela como una compuerta al espacio

me deslizo por ese hueco

a un lugar donde imperan otras lógicas

allí vuelvo mis ojos al vacío

en busca de un sentido más certero

Stargate

Stargate

ha llegado el otoño

salí de casa a cuerpo esta mañana

y tuve que volver para ponerme el plumas

hacía un viento frío y familiar

anunciaba el final de otro verano

crucé la puerta del parque o un túnel

a un mundo que se llama La Herrería

suelo sentarme un rato

en un banco escondido entre los tilos

allí la luz se filtra

en un caleidoscopio de hojas

un buen lugar para pensar o no

y escuchar a los tilos parlotear con el viento

ellos ya lo sabían

la noche amarilleó algunas hojas

o fue el viento primero que el nuevo otoño enviaba

hay un bosque de robles más allá de los tilos

lo atraviesa una senda

en la que olvidas que estás en un parque

allí domina el jabalí en la noche

y en cuánto alumbra el sol es auditorio

 de pinzones currucas y oropéndolas

todo cambia y parece que cada vez que cruzo

la puerta de este parque

entro en un mundo nuevo

donde las estaciones son la escena

y hay actores que cuentan una historia

como el fresno podado

mi comunista

un puño firme que se alza de la tierra en invierno

y se transforma en Jimmy Hendrix cuando le crecen los vástagos

hay otro banco en un lugar perfecto

para un retrato al óleo

entre dos fresnos en una colina apartada del camino

sobre el valle que forman las Machotas

y los cerros que llevan hasta Abantos

volviendo se camina por un largo paseo

flanqueado de altos plátanos de fresnos y algunos olmos y arces

y a su término espera una familia de secuoyas

que como las campanas del templo de Heian

me recuerdan la temporalidad de todas las cosas

y así son mis días

testigos de mis pasos

público de mis versos

Puertas

Puertas

yo soy de los que dejan las puertas entornadas

me basta una rendija para poder mirar

cerrar y echar la llave

es amputar un cuarto

y aunque esta casa crece cada día

ampliándose con nuevos dormitorios

cada uno de ellos tiene una función

pero a veces dejar las puertas bien cerradas

para que el polvo cubra lámparas y muebles

se pegue en los espejos

suaviza las aristas

y permite que un día las pueda abrir sin daño